
Chile & Travel y su área comercial asistiendo a Seminario organizado por Universidad Adolfo Ibañez Eclass,Tema «Innovación para la superación de la pobreza en América Latina» Expositor : Sr.Benito Baranda Presidente Ejecutivo América Solidaria y como moderador Sr. Juan Pedro Pinochet Ex-Director Ejecutivo de Techo para Chile y Socio fundador y Gerente General Gestión Social.
En este Seminario se trataron diferentes temas que buscan fomentar la cooperación solidaria entre las naciones americanas, sobre las diferentes formas de innovación para superar la pobreza en América Latina, sobre el rol de la familia, de la educación, el papel de la mujer, la importancia de la colaboración y el entendimiento para sacar adelante las ideas y así promover socialmente a los más desvalidos.
Más de una cuarta parte de la población de América Latina vive con menos de un dólar por día. Las mayores concentraciones de pobreza se hallan en Centroamérica, la Región Andina, y Nordeste brasileño, donde un 60% de los habitantes vive por debajo del umbral de la pobreza.
Algunas cifras en relación a la desigualdad (54% para la región, en términos relativos) es parecida a la de 1980, mientras que la de pobreza extrema es más alta (31% frente a 28%). Desde comienzos del decenio de 1990, los pobres de las zonas urbanas (principalmente mujeres jefes de hogar, padres con educación formal escasa o nula y jóvenes desempleados) por primera vez han llegado a ser más numerosos que los de las zonas rurales. Los primeros se estiman actualmente en más de 126 millones, mientras que los últimos suman 78 millones. Sin embargo, hay más habitantes rurales que urbanos en situación de extrema pobreza (47 millones en comparación con 42.7 millones), aunque un alto porcentaje de los pobres que viven en zonas urbanas son recién llegados desde las zonas rurales.
EL PAPEL DE LA INNOVACIÓN EN EL DESARROLLO LATINOAMERICANO
La economía global del conocimiento descansa en la innovación y en el capital intelectual como factores de competitividad y crecimiento sostenido. Junto a ello, el cambio climático, la pobreza y los límites de las fuentes energéticas tradicionales otorgan también una especial relevancia a la innovación para la búsqueda de soluciones a estos problemas desde el ámbito técnico, social y económico. En el contexto específico de América Latina y el Caribe (ALC), la innovación debería servir para enfrentarse a varios retos como la pobreza, la desigualdad y la baja productividad, sin olvidar el impulso del desarrollo sostenible y la justicia social.
Por tanto, se trataría de impulsar el cambio de los modelos productivos en los países de la región para transformarlos, con las especificidades propias de cada uno, en sociedades del conocimiento que respondan a los desafíos de nuestro tiempo.
Para trazar un panorama general de la situación de la I+D+I en la región, cabe analizar tres categorías de indicadores:
- a) Los indicadores de insumos, recursos o aportes, como gastos en I+D+I o cantidad de investigadores.
- b) Los indicadores de resultado o productos, como publicaciones, científicas, patentes y exportaciones de tecnología.
- c) Los indicadores sintéticos, es decir, índices compuestos de varios indicadores, que facilitan una visión global de la situación a través de rankings de países en innovación y competitividad.
Factores esenciales para el éxito de las colaboraciones público-privadas en innovación: lecciones de los países de la OCDE
• Compromiso a largo plazo tanto de los poderes públicos como de la industria, basado en una visión compartida.
• Masa crítica y profundidad de los sistemas nacionales y regionales de innovación. Las colaboraciones público-privadas no deberán crear “islas de alta tecnología”, sino integrarse en clusters locales y regionales de innovación y beneficiar tanto a las pymes como a las grandes empresas.
• Adopción de las redes existentes como punto de partida, sin descuidar aquellas áreas en las que los agentes aún se hallan dispersos (p. ej., investigación multidisciplinaria) o carecen de experiencia para recabar apoyo público.
• Eficaces mecanismos de dirección que garanticen un equilibrio sostenible entre los intereses públicos y privados, en concreto:
- selección competitiva de proyectos y participantes;
- financiamiento óptimo;
- organización y administración eficaces,
- rigurosa evaluación.
Por todos estos factores, las alianzas público-privadas se presentan como un instrumento adecuado para impulsar la colaboración en el ámbito de la investigación multidisciplinar, con la que crear redes estables de innovación que permitan el desarrollo de distintos sectores estratégicos.
Recomendaciones surgidas de los debates en la Comunidad Iberoamericana para incentivar la innovación.
Para las políticas públicas
- Incrementar el gasto en desarrollo científico y tecnológico, combinando gasto gubernamental e incentivos al sector privado
- Contar con una estrategia, priorizando sectores y actividades
- Apoyo considerable a las PYME
- Prioridad en las políticas públicas de demandas sociales vinculadas a situaciones particulares
- Capacitación de líderes políticos, sociales y empresariales para propiciar el cambio cultural que sitúe a la innovación en el centro de la agenda de desarrollo.
Para incentivar la innovación en las empresas
- Adaptación de los estímulos al sector privado (subsidios, incentivos fiscales, financiación, capital riesgo) a la etapa del proceso (propuesta, ejecución, desarrollo, comercialización)
- Estímulos públicos en etapas iniciales y compartidos a medida que avanza el proceso
- Divulgación amplia de los programas y reducción de los trámites burocráticos
- Utilizar el poder de compra del estado para incentivar a los sectores innovadores
- Incorporar la transformación de la cultura empresarial respecto a la innovación como prioridad de la RSE.
En relación con la academia
- Aumentar los recursos asignados a investigación, especialmente a la investigación aplicada
- Avanzar en la modernización e internacionalización de las universidades: impulso a la movilidad académica y la formación para la innovación en las áreas económica y social e impulso a carreras tecnológicas
- Priorizar en el espacio iberoamericano la cooperación en acreditación, reconocimiento, movilidad y cooperación en la investigación
- Estimular la relación investigadores-sector privado, incluyendo la búsqueda de financiación
- Apoyar la investigación en consorcios universidad-empresa
- Incentivar la apropiación por la universidad de los beneficios de la investigación
- Fomento del espíritu innovador y emprendedor en las zonas de mayor vulnerabilidad.
- Crear centros de investigación en sectores económicos y sociales que apoyen a las empresas
- en particular a las PYME- en la creación, adopción y adaptación de conocimiento.
Este es un breve resumen en relación a este Seminario , suscribase a nuestro newslester comercial Chile & Travel